Hospital
Decía William Osler, médico canadiense de principios del siglo XX, que la medicina es una ciencia de la incertidumbre y un arte de la probabilidad. En efecto la medicina no es una ciencia exacta, es la menos exacta de las ciencias, cada paciente es diferente y cada tratamiento actúa diferente en cada uno de ellos. La medicina veterinaria es aún más complicada, se asemeja a la pediatría en humana y en ocasiones el mejor diagnóstico se realiza mediante la observación detallada del paciente en la intimidad. La hospitalización es entonces fundamental para el desarrollo de la actividad médica veterinaria y contar con un buen hospital acondicionado a cada especie es de vital importancia.
La hospitalización es importante además en animales críticos, animales convalecientes y aplicación de tratamientos largos y complejos.